lunes, 5 de septiembre de 2011

La verdad verdadera


Antonio era un niño mentiroso por naturaleza. En su cabecita se formaban palabras ciertas pero en el camino hacia sus labios se transformaban en historias increíbles. 
Contaba que la maestra lo ponía a hacer de espantapájaros. Pero no le salía bien y se le llenaban los brazos de mirlos y petirrojos.
Solía decir que en el monte habitaba una princesa. Era hermosísima pero estaba encantada y no podía volver al pueblo.
Un día se topó con un oso de seis metros. De un zarpazo le quitó el pan y le dejó esas marcas en la espalda.
Y lo más increíble, contaba que por las noches, cuando todos dormían, le visitaba un monstruo con la cara de su padre.

23 comentarios:

Mar Horno dijo...

El final es espeluznante. Pobre niño. Buenísimo Sara.

Luisa Hurtado González dijo...

Qué duro y qué bueno te ha salido. Con qué habilidad nos llevas de la más pura fantasía a la realidad más terrible.
Felicidades, es muy bueno

montse dijo...

Me encanta el segundo párrafo, en el que no le sale bien hacer de espantapájaros. Voy a quedarme esa imagen, que es la que más me gusta. El final aparte de ser horrible es muy triste, interpreto un niño que no puede creer que su padre haga eso, así que debe ser un monstruo que suplanta su cara.

MJ dijo...

Fantasía y realidad enmarañadas como única vía de escape.
Triste y genial, Sara.

Un beso.

Sara Nieto dijo...

Muchas gracias, Mar. Pretendía que fuera espeluznante, como la verdad más verdadera.

Sara Nieto dijo...

Luisa, me encantan tus comentarios. Son el aderezo ideal de mis micros. Muchas gracias guapa.

Sara Nieto dijo...

Muy bien interpretado, Montse. Y sí, a mí me gusta la imagen del niño "haciendo de espantapájaros" en mitad de la clase e imaginándose los pájaros en sus brazos.

Sara Nieto dijo...

MJ, los niños suelen hacer eso: enmascaran las cosas con un halo de fantasía para hacerlas más a su medida y cuanto más terribles son sus experiencias más fantasía le ponen.

Besitos y gracias

Rocío Romero dijo...

Joerp Sara, me has dejado heladita hasta los huesos. Es sensible y certero. Excelente micro, guapa, me encantó.
Besos

Sara Nieto dijo...

Siento haberte dejado helada, Rocío, pero si es así me alegro. Eso significa que conseguí mi objetivo. Me encanta que te encante.

Besitos.

Maite dijo...

Brutal, Sara, un micro muy efectista. La verdad verdadera se esconde entre todas esas otras fantasías que le alejan de la cruda realidad. Besos!

Elysa dijo...

Muy duro, pero lo cierto es que has conseguido con tu micro que el lector vea esa terrible realidad con las palabras justas.
Muy bueno.

Besitos

Luis (Flamel) dijo...

no conocia este lugar poblado de sueños ,espantapajaros ,niños mentirosos que sueñan verdades...

Me quedo por aqui...

Sol en las alturas dijo...

Increíble relato.
¡Y qué final!

Me quedo por aquí.

Besos.

Sara Nieto dijo...

Maite, Elysa: gracias por vuestros comentarios y vuestras alabanzas. Las recojo encantada.

Besitos a las dos.

Sara Nieto dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Sara Nieto dijo...

Flamel: me alegro de que hayas "caído" por aquí y de que decidas quedarte. Eres bienvenido.

Sara Nieto dijo...

Ene, bienvenida. Me alegro de que hayas decidido quedarte. Espero seguir agradándote con mis relatos.

Miguel Ángel de Móstoles dijo...

¡¡OSTRAS!! SIN COMENTARIOS Sara.

Sara Nieto dijo...

Hombre, Miguel Ángel. Cuánto tiempo sin leerte. Veo que por fin has vuelto. Te has tomado unas buenas vacaciones, ¿eh?

Gracias por tu comentario.

Besitos

F dijo...

He leído que pretendías espeluznar y lo has conseguido. Yo que también suelo ser fantasioso, me identifico con tu relato más de lo que sospechas.

Sara Nieto dijo...

Me "alegro" de haberte espeluznado, Fer. Espero que a pesar de tus fantasías no tengas nunca una que esconda algo tan horrible.

Besitos.

Anónimo dijo...

wow Sara NY, genial que talentosa, sutil y drástica ala vez.